lunes, 30 de marzo de 2015

SAN JUAN CLÍMACO



El apellido de este santo proviene de un libro famoso que él escribió y que llegó a ser inmensamente popular y sumamente leído en la Edad Media. El nombre de tal libro era "Escalera para subir al cielo". Y eso mismo en griego se dice "Clímaco".

San Juan Clímaco nació en Palestina y se formó leyendo los libros de San Gregorio Nazanceno y de San Basilio.

A los 16 años se fue de monje al Monte Sinaí. Después de cuatro años de preparación fue admitido como religioso.

El mismo narraba después que en sus primeros años hubo dos factores que le ayudaron mucho a progresar en el camino de la perfección. El primero: no dedicar tiempo a conversaciones inútiles, y el segundo: haber encontrado un director espiritual santo y sabio que le ayudó a reconocer los obstáculos y peligros que se oponían a su santidad.

De su director aprendió a no discutir jamás con nadie, y a no llevarle jamás la contraria a ninguno, si lo que el otro decía no iba contra la Ley de Dios o la moral cristiana.

Pasó 40 años dedicado a la meditación de la Biblia, a la oración, y a algunos trabajos manuales. Y llegó a ser uno de los más grandes sabios sobre la Biblia de Oriente, pero ocultaba su sabiduría y en todo aparecía como un sencillo monje más, igual a todos los otros.

En lo que sí aparecía distinto era en su desprendimiento total de todo afecto por el comer y el beber. Sus ayunos eran continuos y los demás decían que pareciera como si el comer y el beber más bien le produjera disgusto que alegría. Era su penitencia, ayunar, ayunar siempre.

Su oración más frecuente era el pedir perdón a Dios por los propios pecados y por los pecados de la demás gente. Los que lo veían rezar afirmaban que sus ojos parecían dos aljibes de lágrimas. Lloraba frecuentemente al pensar en lo mucho que todos ofendemos cada día a Nuestro Señor. Y de vez en cuando se entraba a una cueva a rezar y allí se le oía gritar: ¡Perdón, Señor piedad. No nos castigues como merecen nuestros pecados. Jesús misericordioso tened compasión de nosotros los pobres pecadores! Las piedras retumbaban con sus gritos al pedir perdón por todos.

El principal don que Dios le concedió fue el ser un gran director espiritual. Al principio de su vida de monje, varios compañeros lo criticaban diciéndole que perdía demasiado tiempo dando consejos a los demás. Que eso era hablar más de la cuenta. Juan creyó que aquello era un caritativo consejo y se impuso la penitencia de estarse un año sin hablar nada ni dar ningún consejo.

Pero al final de aquel año se reunieron todos los monjes de la comunidad y le pidieron que por amor a Dios y al prójimo siguiera dando dirección espiritual, porque el gran regalo que Dios le había concedido era el de saber dirigir muy bien las almas. Y empezó de nuevo a aconsejar. Las gentes que lo visitaban en el Monte Sinaí decían de él: "Así como Moisés cuando subió al Monte a orar bajó luego hacia sus compañeros con el rostro totalmente iluminado, así este santo monje después de que va a orar a Dios viene a nosotros lleno de iluminaciones del cielo para dirigirnos hacia la santidad".

El superior del convento le pidió que pusiera por escrito los remedios que él daba a la gente para obtener la santidad. Y fue entonces cuando escribió el famoso libro del cual le vino luego su apellido: "Clímaco", o Escalera para subir al cielo. Se compone de 30 capítulos, que enseñan los treinta grados para ir subiendo en santidad hasta llegar a la perfección.

El primer peldaño o la primera escalera es cumplir aquello que dijo Jesús: "Quien desea ser mi discípulo tiene que negarse a sí mismo". El primer escalón es llevarse la contraria a sí mismo, mortificarse en algo cada día. El segundo es tratar de recobrar la blancura del alma pidiendo muchas veces perdón a Dios por pecados cometidos, el tercero es el plan o propósito de enmendarse y cambiar de vida. Los últimos tres, los peldaños superiores, son practicar la Fe, la Esperanza y la Caridad. Todo el libro está ilustrado con muchas frases hermosas y con agradables ejemplos que lo hacen muy agradable.

A San Juan Clímaco le concedió Dios otro gran regalo y fue el de lograr llevar la paz a muchísimas almas angustiadas y llenas de preocupaciones. Llegaban personas desesperadas a causa de terribles tentaciones y él les decía: "Oremos porque los malos espíritus se alejan con la oración". Y después de dedicarse a rezar por varios minutos en su compañía aquella persona sentía una paz y una tranquilidad que antes no había experimentado nunca. El santo decía a la gente: "Así como los israelitas quizás no habrían logrado atravesar el desierto si no hubieran sido guiados por Moisés, así muchas almas no logran llegar a la santidad si no tienen un director espiritual que los guíe". Y él fue ese guía providencial para millares de personas por 40 años.

Un joven que era dirigido espiritualmente por San Juan Clímaco, estaba durmiendo junto a una gran roca, a muchos kilómetros del santo, cuando oyó que este lo llamaba y le decía: "Aléjese de ahí". El otro despertó y salió corriendo, y en ese momento se desplomó la roca, de tal manera que lo habría aplastado si se hubiera quedado allí.

En un año en el que por muchos meses no caía una gota de agua y las cosechas se perdían y los animales se morían de sed, las gentes fueron a donde nuestro santo a rogarle que le pidiera a Dios para que enviara las lluvias. El subió al Monte Sinaí a orar y Dios respondió enviando abundantes lluvias.

Era tal la fama que tenían las oraciones de San Juan Clímaco, que el mismo Papa San Gregorio le escribió pidiéndole que lo encomendara en sus oraciones y le envió colchones y camas para que pudiera hospedar a los peregrinos que iban a pedirle dirección espiritual.

Cuando ya tenía más de 70 años, los monjes lo eligieron Abad o Superior del monasterio del Monte Sinaí y ejerció su cargo con satisfacción y provecho espiritual de todos.

Cuando sintió que la muerte se acercaba renunció al cargo de superior y se dedicó por completo a preparar su viaje a la eternidad.

Y al cumplir los 80 años murió santamente en su monasterio del Monte Sinaí. Jorge, su discípulo predilecto, le pidió llorando: "Padre, lléveme en su compañía al cielo". El oró y le dijo: "Tu petición ha sido aceptada". Y poco después murió Jorge también.

sábado, 28 de marzo de 2015

SAN GUNTRANO



Era nieto de Santa Clotilde. Hermano de los reyes Charibert y Sigebert.

Sus primeros pasos del monarca no fueron los de un santo precisamente. Repudió a su primera esposa, Veneranda, luego de haberle dado sólo un heredero que murió a edad temprana. La segunda esposa, Merestrude no tuvo mejor suerte, murió poco después de su parto junto con el niño. Austrechilde, la tercera esposa, le dio dos niños que murieron jóvenes.

Guntrano, luego de estas vivencias, llegó a la conclusión de que su luto era consecuencia de los pecados cometidos, se comprometió a no caer en la tentación de cambiar de esposa en la búsqueda de un heredero, adoptando a su sobrino Chieldeberto, huérfano de uno de sus hermanos.

En su conversión al cristianismo superó así con remordimiento los actos anteriores de su vida, consagrando su energía y fortuna a construir la Iglesia.

Pacificador, protector de los oprimidos, atendía a los enfermos, tierno con sus súbditos, generoso en sus limosnas, especialmente en épocas de hambre o plaga. Obligaba al correcto cumplimiento de la ley sin favoritismos, perdonó incluso ofensas contra él incluyendo a dos que intentaron asesinarlo.

Murió el 28 de Marzo de 592, fue enterrado en la Iglesia de San Marcelo que él había fundado, su cráneo ahora se conserva en una urna de plata.

Fue declarado santo casi inmediatamente después de su muerte por sus súbditos.

viernes, 27 de marzo de 2015

SAN PEREGRINO



San Peregrino no era ciertamente un ignorante. Hijo de una familia noble y rica, oriundo de Falerone, diócesis de Fermo, hoy provincia de Ascoli Piceno; una ciudad de las Marcas que trae el nombre de la destruida ciudad romana Faleria, en el valle de Tenna, entre Amándola y Monte Giorgio.

En Bolonia había estudiado filosofía y derecho canónico, y era profundamente versado en las ciencias sagradas y profanas. Sin embargo, cuando Peregrino se presentó a San Francisco, oyó que le decía: “Tú servirás a Dios en la humilde condición de hermano religioso y te aplicarás sobre todo a la práctica de la humildad”.

Peregrino tomó la profecía de San Francisco como un mandato, y durante toda su vida quiso permanecer en la modesta condición de religioso hermano, entregado a los servicios más humildes y a menudo oculto en los conventos más pobres y escondidos.

Según decir de Fray Bernardo de Quintaval, fue, entre los primeros discípulos de San Francisco, uno de los religiosos más ejemplares.

Inflamado en sagrado fervor, buscó el martirio a manos de los infieles, y como el mismo San Francisco, pasó el mar para ir a Tierra Santa en medio de los musulmanes. El martirio a manos de los mahometanos, considerados entonces como los “mata cristianos” por antonomasia, era con frecuencia la devota aspiración de muchos hermanos. En realidad y en circunstancias normales los árabes, especialmente en Tierra Santa, eran tolerantes y respetuosos para con los huéspedes cristianos, y más con los misioneros.

En el caso de Peregrino, más bien faltó poco para que naciera a su alrededor la veneración precisamente por parte de los musulmanes.

Y no podía ser de otro modo, frente a aquel frailecito descalzo que visitaba los lugares santos con el libro de los evangelios en la mano, esparciendo en todas partes a raudales lágrimas de compasión y piedad.

Vuelto a Italia, Peregrino de Falerone volvió a esconderse en los lugares más ocultos y en los conventos más alejados. Pero por más que se hiciera pequeño y humilde, la luz de su santidad resplandecía aun desde debajo del celemín y destellaba en el brillo de los milagros que se le atribuyeron en vida.

En los últimos años de su vida, todavía joven, vivió en el convento de San Severino Marcas y allí murió en 1233. Sepultado en la iglesia de los Cistercienses, La Madonna de las Luces.

Nuevos milagros acaecidos en su sepulcro, hicieron aún más amado y venerado su recuerdo.

jueves, 26 de marzo de 2015

SAN LUDGERO



La historia de San Ludgero, primer obispo de Münster, nacido hacia el 745 en Suescnon, en Frisia, de noble familia, está unida a un hecho nuevo en el mundo cristiano: en ese tiempo el cristianismo pasó las fronteras del imperio romano, con la evangelización de la Germania transrenana.

En esta obra misionera, que logró el máximo desarrollo con San Bonifacio, encontramos comprometido a San Ludgero, discípulo de San Gregorio y de Alcuino de York. Después de la ordenación sacerdotal, que recibió en Colonia en 777, Ludgero se dedicó a la evangelización de la región pagana de Frisia, en donde San Bonifacio había sufrido el martirio.

Los métodos usados por el emperador Carlomagno para someter esta región y cristianizarla no estaban muy de acuerdo con el espíritu evangélico. En el 776, durante la primera expedición, el monarca impuso el bautismo a todos los soldados vencidos; pero con la revuelta de Widukindo hubo una apostasía general. Ludgero tuvo que huir y, después de haber pasado por Roma, llegó a Montecassino, en donde vistió el hábito monacal sin haber emitido todavía los votos.

La rebelión de Widukindo fue aplastada en el 784, y la represión fue brutal. El rechazo del bautismo y el incumplimiento del ayuno cuaresmal se castigaban con la muerte; pero este régimen de terror, contra el que se levantó el gran maestro Alcuino, hacía odioso al mismo cristianismo, que, sin embargo, floreció maravillosamente, gracias a los auténticos predicadores del Evangelio, como San Ludgero, a quien el mismo emperador fue a buscar a Montecassino para que regresara a la patria y se dedicara a predicar en Frisia.

Poco después, para premiarlo por su celo, le ofreció el episcopado vacante de Tréveris, mas el santo lo rechazó. Pero sí aceptó su tarea de misionero y, entonces, tomó el puesto del abad Bernardo en el territorio de Sajonia.

En el 795 Ludgero erigió allí un monasterio, alrededor del cual surgió la ciudad actual de Münster en alemán Münster quiere decir monasterio. El territorio pertenecía a la jurisdicción eclesiástica de Colonia, pues Ludgero aceptó solamente en el 804 ser consagrado obispo de la nueva diócesis. Antes de esta fecha el infatigable misionero no tenía residencia fija.

Construyó iglesias y escuelas y fundó nuevas parroquias que confió a los sacerdotes que él mismo había formado en su escuela cerca de la catedral de Mimigernaeford. También se debe a él la fundación del monasterio benedictino de Werden en donde después fue sepultado.

Murió el 26 de marzo del 809 e inmediatamente fue venerado como santo. Su tumba en Werden sigue siendo meta de peregrinaciones.

FRANCISCO I MADERO



Francisco Ignacio Madero González nació en Parras de la Fuente, Coahuila, el 30 de octubre de 1873. Murió en la Ciudad de México, el 22 de febrero de 1913) fue un empresario y político mexicano. Su proclamación en contra del gobierno de Porfirio Díaz suele considerarse como el evento que inició la Revolución mexicana de 1910. Durante este conflicto, Madero fue elegido presidente de México, cargo que ejerció desde el 6 de noviembre de 1911 hasta el 19 de febrero de 1913. Tres días más tarde, fue asesinado junto con el vicepresidente José María Pino Suárez como resultado del golpe de estado organizado por Victoriano Huerta.

Francisco I. Madero nació en la hacienda de El Rosario, Parras de la Fuente, Coahuila, el 30 de octubre de 1873. Hijo de Francisco Madero Hernández y de Mercedes González Treviño. Estudió en el colegio jesuita de San Juan Nepomuceno Saltillo, en 1886 hizo estudios de agricultura en Maryland, Estados Unidos, y estudios de peritaje mercantil en la escuela HEC Hautes Études Commerciales Jouy-en-Josas, cerca de París, Francia y estudió en el departamento de agricultura en la Universidad de California en Berkeley. En 1893 regresa a Coahuila y se encarga de administrar una de las haciendas de su padre, se casa con Sara Pérez Romero en 1903, en 1904 funda el partido democrático independiente que se oponía a la reelección del Gobernador de Coahuila Miguel Cárdenas, en1905 tuvo contacto con la Junta Organizadora del Partido Liberal Mexicano, a la cual apoyó económicamente para la reanudación de la edición del periódico Regeneración. Sin embargo retiró su apoyo al PLM debido a las diferencias ideológicas con Ricardo Flores Magón; En 1908 publicó su polémico libro La sucesión presidencial en 1910, en el que expuso las principales cuestiones políticas que inquietaban al país. Tuvo mucho éxito. En 1909 fundó el Partido Nacional Anti reeleccionista, opuesto a un Porfirio Díaz que, ocupó la presidencia de la nación desde1877, con un paréntesis de cuatro años 1880 a 1884 en el que el presidente fue Manuel del Refugio "El Manco" González Flores. Elegido candidato a la presidencia por dicho partido, y tras alcanzar un alto nivel de popularidad en las elecciones de 1910, Madero fue encarcelado por orden del gobierno en San Luis Potosí, bajo los cargos de conato de rebelión y ultraje a las autoridades. Logró escapar hacia Estados Unidos y desde San Antonio, Texas promulgó el Plan de San Luis, una llamada a las armas que por fin causaría la renuncia del Presidente Díaz en 1911, seguida de una guerra civil de diez años en la que morirían más de un millón de mexicanos.

En México, Francisco I. Madero asume la presidencia del país. Su mandato se caracterizó por encabezar un gobierno democrático preocupado por las condiciones de vida del pueblo llano, aunque no sabrá satisfacer las aspiraciones de cambio social que tendrían las masas revolucionarias, lo cual provocó alzamientos armados, como el del campesino Emiliano Zapata o la rebelión de Pascual Orozco. Finalmente, el 22 de febrero de 1913, tras un golpe de Estado, él y su vicepresidente serían ejecutados por los golpistas encabezados por Victoriano Huerta que había prometido respetar sus vidas y dejarlos marchar a Cuba.

El 17 de febrero, Huerta suscribió un armisticio con Henry Lane Wilson embajador de Estados Unidos, Félix Díaz sobrino del Gral. Porfirio Díaz y Manuel Mondragón, llamado "El Pacto de la Embajada": se comprometían a colocar provisionalmente en la presidencia al General Victoriano Huerta, a cambio de que éste se la cediera posteriormente a Félix Díaz. El 18 de febrero, un grupo de empresarios capitalinos —entre ellos Ignacio de la Torre y Mier, yerno de Díaz— declararon su fidelidad a Huerta. Ese mismo día, Gustavo A. Madero, hermano y asesor del presidente, fue arrestado, le sacaron el único ojo con una bayoneta, quedando ciego y torturado hasta la muerte. El 19 de febrero, Madero y José María Pino Suárez, vicepresidente, fueron obligados a firmar la renuncia a sus cargos. Pedro Lascuráin se hizo cargo del poder ejecutivo por escasos 45 minutos, en los que su único acto de gobierno fue nombrar secretario de Gobernación a Huerta. Acto seguido, renunció Lascuráin y Victoriano Huerta ocupó la presidencia. El 22 de febrero de 1913, pese a la promesa de los golpistas de respetar su vida y facilitar su exilio a la isla de Cuba, Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez fueron asesinados a un costado del Palacio de Lecumberri en la Ciudad de México.

miércoles, 25 de marzo de 2015

LA VIRGEN MARÍA




Una virgen es en la Santa Biblia una mujer que no ha cometido impurezas.

En el mundo hay muchas mujeres vírgenes, pero una es más pura y más santa que las demás y la llamamos "Santísima Virgen".

Es la madre de Jesús. Comprometida en matrimonio, Desposada: Unos meses antes de casarse, los novios firmaban un compromiso de matrimonio, para que el esposo pudiera dedicarse tranquilamente a preparar todo lo necesario para su próximo hogar, sin peligro de que después la prometida ya no se casara con él.

Desposada a un hombre llamado José.

En Israel era muy estimado el nombre de María.

Así se llamaba la hermana de Moisés, y en tiempos de Jesús este nombre era tan popular, que las tres mujeres que estuvieron presentes en el Calvario, todas tenían el nombre de María. Las tres Marías. María es un nombre que significaba "Señora" o "Princesa", pero varios autores dicen que en Egipto el nombre de María proviene de dos palabras: "Mar": la hija preferida, e "ia": abreviatura de IAVEH: Dios. Por lo cual el nombre de María significa: La hija preferida de Dios. Y en verdad que sí corresponde muy bien este significado a lo que en realidad ha llegado a ser la Madre de Jesús: la hija que más quiere Dios.

Y entrando, le dijo: «Salve, llena de gracia, el Señor está contigo» Salve: En hebreo, Shalon Jalai, o sea: ¡Yo te saludo.

Te felicito. Alégrate! Cada vez que rezamos el Avemaría saludamos a la Virgen con el mismo saludo con el que la saludó el ángel en el día más feliz de su vida, en el día de la Anunciación, cuando ella empezó a ser Madre de Dios. Podremos decir que no hemos saludado al Presidente o al Papa, pero sí hemos saludado muchas veces a la Virgen Santa con el saludo que a Ella más le agrada, el que le compuso el mismo Dios en persona. Llena de gracia: La mujer que más gracias o favores ha recibido de Dios.

Llena de gracia quiere decir: la muy simpática para Dios. Si Ella hubiera tenido algún pecado, ya no habría sido totalmente simpática para Nuestro Señor. Pero Ella no tuvo ni la más mínima mancha de pecado. El Señor está contigo: Los israelitas cuando querían animar a una persona y asegurarle que le iban a suceder cosas maravillosas le decían: "El Señor está contigo". Es que "si Dios está con nosotros, ¿quién podrá contra nosotros?".

Cada vez que rezamos el Avemaría felicitamos a la Virgen por esta bella noticia: ¡El Señor está siempre contigo! ¡Y ojalá que esté siempre también con cada uno de nosotros! «Ella se conturbó por estas palabras, y preguntaba qué significaría aquel saludo.

El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios ». No temas: Es una frase que en la Santa Biblia se repite muchas veces, dirigida hacia las personas que Dios elige para sus grandes obras.

¡No temas, porque Dios va contigo y te ayudará en todo. ¡No temas! «has hallado gracia delante de Dios» Maravilloso elogio. Ojalá se pudiera decir también de cada uno de nosotros. «Vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús.» El nombre Jesús significa: el que salva de los pecados. Porque El ha venido a salvarnos a los pecadores y a pagar nuestras deudas ante Dios.

«Él será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin. » Bellísimas noticias acerca de Jesús, que conviene recordar y no olvidar jamás. María respondió al ángel: '¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón? El ángel le respondió: 'El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios... Dijo María: 'He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.'

Y el ángel dejándola se fue. Y en aquel momento el Hijo de Dios se encarnó y se hizo hombre en el vientre Santísimo de la Virgen María.

Día grande y mil veces bendito en el que Dios se vino a vivir entre nosotros.

martes, 24 de marzo de 2015

SANTA CATALINA



Catalina Ulfsdotter, más conocida con el nombre de Catalina de Suecia, era la segunda de los ocho hijos de Santa Brígida, la gran mística sueca que influyó tanto en la historia, en la vida y en la literatura de su país, mucho más que la real compatriota Cristina que llenó con sus rarezas las crónicas mundanas de la Roma del Renacimiento. Brígida y su hija Catalina unieron también sus nombres a la ciudad de Roma, pero con otros méritos.

Catalina nació en 1331, y muy jovencita se casó con Edgar von Kyren, de noble familia y sobre todo de nobles sentimientos, pues consintió al deseo de la joven y graciosa esposa de observar el voto de continencia e, inclusive, con emulación conmovedora en la práctica de la virtud cristiana de la castidad, también él hizo este voto.

Catalina, claro que no para hacer más fácil el cumplimiento del voto, a los 19 años se reunió con su madre en Roma, con ocasión de la celebración del Año Santo. Aquí le llegó a la joven la noticia de la muerte del esposo.

Desde este momento la vida de las dos extraordinarias santas transcurre por el mismo binario: la hija participa con total dedición en la intensa actividad religiosa de Santa Brígida, quien había fundado en Suecia una comunidad de tipo cenobítico, en el pueblito de Vadstena, para acoger en conventos separados de clausura hombres y mujeres bajo una regla de vida religiosa inspirada en el modelo del místico Bernardo de Claraval. Durante el período romano que se prolongó hasta la muerte de Santa Brígida, el 23 de julio de 1373,

Catalina estuvo continuamente junto a la madre, en las largas peregrinaciones que emprendió, frecuentemente entre graves peligros, de los que las dos santas salieron ilesas por intervención sobrenatural.

A Santa Catalina se la representa frecuentemente junto a un ciervo, que, según la leyenda, apareció varias veces misteriosamente para ponerla a salvo.

Después de llevar el cadáver de la madre a la patria, en 1375 Catalina entró al monasterio de Vadstena, del que fue elegida abadesa en 1380.

Acababa de regresar de Roma, en donde había estado nuevamente cinco años para seguir de cerca el proceso de beatificación de la madre, que terminó positivamente en 1391.

Según una leyenda, Catalina, aleó a Roma de un desbordamiento del río Tíber.

El Papa Inocencio VIII permitió el solemne traslado de las reliquias: pero será la unánime y universal devoción popular la que le decreta el título de santa y le celebra la fiesta el día aniversario de la muerte, el 24 de marzo de 1381.