SAN MIGUEL
La fiesta
a la que nos referimos hoy, se ha celebrado con gran solemnidad a fines de
setiembre, desde el siglo sexto por lo menos. El Martirologio Romano afirma que
la festividad se celebra la dedicación de una Basílica en honor de San Miguel,
a unos 10 kilómetros al norte de Roma. En el oriente, donde antaño se tenia al
arcángel como protector de los enfermos actualmente se le considera como
Capitán de las legiones celestiales y Patrón de los soldados, la veneración a
San Miguel es todavía mas antigua.
Aunque
solamente a San Miguel se le menciona como titular de la festividad, en las
oraciones que pronuncia los fieles en la misa también están comprendidos todos
los ángeles y buenos y el glorioso ángel tutelar de la Iglesia.. En esas
oraciones se pide que demos gracias a Dios por la gloria de que gozan los
ángeles y que nos alegremos de felicidad, así como también, se nos invita a
honrar a los ángeles y a implorar su intercesión y ayuda.
Por
decreto de la Sagrada Congregación de Ritos, se ordenó que la fiesta de San
Gabriel Arcángel fuera considerada en el futuro como doble de primera clase, a
partir del 24 de marzo, para toda la Iglesia occidental. Según el profeta Daniel
fue Gabriel el que anunció le anunció el tiempo de la venida del Mesías; que
fue él, de nuevo, quien se apareció a Zacarías "estando de pie a la
derecha del altar del incienso" para darle a conocer el futuro nacimiento
del Precursor y finalmente, que el arcángel como embajador de Dios, fue enviado
a María, en Nazaret para proclamar el misterio de la Encarnación. Es por lo
tanto apropiado que Gabriel sea honrado en este día que precede a la fiesta de
la Anunciación de la Santísima Virgen. Por otro lado, existe evidencia
arqueológica que el culto de San Gabriel no es en ningún sentido una
innovación; hay muchas representaciones del ángel en el arte primitivo
cristiano, tanto de oriente como de occidente. Este mensajero del cielo es
también el santo patrón de los que trabajan en los servicios postales, de
telégrafos y teléfonos.
La Biblia
sólo menciona por su nombre a tres de los siete Arcángeles que, según la
tradición judío cristiana, se hallan más cerca del trono de Dios: Miguel,
Gabriel y Rafael.
SAN RAFAEL
En el
Libro de Tobías se cuenta que Dios envió a San Rafael a ayudar al anciano
Tobías, quien estaba ciego y se hallaba en una gran aflicción, y a Sarah, la
hija de Raquel, cuyos siete maridos habían muerto la noche del día bodas. San
Rafael tomó la forma humana y se hizo llamar Azarías. Éste, acompañó a Tobías
en su viaje, le ayudó en sus dificultades y le explicó cómo podía casarse con
Sarah sin peligro alguno. En el libro de Tobías él mismo Arcángel se describe
como "uno de los siete que están en la presencia del Señor".
No hay comentarios:
Publicar un comentario